i? aIta que ſe con ſuma la tercia parte. Cuelen-
ta y echenle vna eſcudilla de Miel blanca y ſe-
ys oncas de Acucar y tres de buẽ vin agre, y ba.
ciua a cozer, haſta que eſpume. Tome las ma-
ñanas quatro oncas d̃ eſte xaraue, y fieras que
tro vna hora antes de cenar; La purga fe Vios
oncas de buena Cañañitola, y tres tomállíes de
peſo d̃ poluos de la rayz de Marlarliztil¶todos
tomines de Mechoacan, y en agua de OR¿ga,
no ó de Anís la deſaten. La que pudiere en il¶i"
ar por las purgas que dixe arriba, hagalo, que
ſon mas apropriadas para el mal.
Si el mal de madre viene por retencion ya
bundancia de la ſemilla, como ſe conoſccra ẽ
los accidentes, que ſon granes, y ſi la enferma
es catada, y tiene auſente el marido, ó es biu-
das eſtando el mal en ſu vigor y fuerca, hagan
todos los remedios, que dixe arriba, al princi
pio de la cura. Saluo las fan grias, que aquí no
conuienẽ, que ſe hagan Horque con ellas en-
frtartamos tanto la madre, que ſubiran mayo
res va pores al coracon y cabeca de la ſemilla
corrompida. Hauiendo paſtado aquella furia
de accideres. Es muy buen remedio ( para diſ
Il,
