Libro Quareo "" perimẽtado muchas vezes, y no me hay, ¿y. mo dizen) de dar gracias á nuestro bue¿ì,"" de ver con quanta facilidad y brebedad """ las heridas, y llagas, y viendo y eſperime¿"" do eflo que digo, determine tomar el tral, ¿, [ de ponerlo aqui, para que todos ſe aproueer; y configan tan grande beneficio. Y ſi cada via, [ en ſu arte deue faticr, lo que ha de hazer, par, [ que acierte muy mucho mas en el de la cituna [ (tan necestaria á la vida del hombre conuie- ne que sepa el cirujano, como ha de curarla. [ herida limple, y como la compuesta Que nir [ dicinas ha de poner á la vna y que á la otra va ] confiello, que estudiando cada dia, y vienda. [ lo que otros eſcrines, y hazen, me he aprove. [ chado, y ſiempre me precio de aprender, de [ nos Dios ſu diuina gracia, para que aprenda [ mos á temerle, pues el principio de la ſabida [ ria, es el temor de Dios. Tratando de la cura de la llaga freſca, diga [ lo primero, que su diffinicion es verdadera la [ lucion de continuyda:l, ſin ninguna mala cer [ tucion. La llaga freſca ſe diuide en dos man"; [ ras, en llaga limple y en llaga compueſtat"" [ |
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