tir el numero fino que le puede paſar con a-
quella z neralidad. Pues no ay obligaciõ de
conf. ll t les peccados ventales y ya que en
el numero mintielle por ter materia teti yvo
lan aria. folamente peccati, venias mente. Y
no ay que reparar en que preguntad, s de co-
ſas limanas, diran que las tenian por pecca-
do mortal, porque quando obrá o no ados. r
tentino como niños, o ya que aduierten que
es malo, no hazen juy zio de mortal ni venias,
y aſsi queda en ſu naturaleza de venias, lo que
de ſuyo lo es. Y en lo que toca al numero de
las cos pas mortales ni el confeñorío d ue al-
liixir por ſaber el numero cierto, ni alflixir
al penitente, porque no ſe los dize . Como
dicen Cayerano, Pray Pedro de Soto, y Fray
Domingo de Soto, Nauarro y otros muchos.
crincipalmente quado propter ruditatem vel
consuetudinen, vix potest pernitens numerare
peccata, vea fe Henrico Henriquez to, r. de.
Sacramẽtili. 7. Et de ponit. facto lib. x. cap.
1. S. o. ". xit, emerario del tiẽpo que en estos
est:rio. fi vo año o mas, y procure le reduz-
ga iñ. atantas vezes pecaso mas o menos
y fi ir, puede el año, a lo menos cada mes. o
nada ſemana, y enterarle no y ot̃o de las in-
f̃" "" "" "" "" "" la l̃ clina
