T II. E. O T. O CTA,
los no ſanctos por muchas vezes q̃ lo vean,
como lo hazia nueſtro padre Sant Éranciſ-
co de ver vna a ueja o otras coſas ſemejan-
tes, las qual es juzgaua dener ſer honradas
por el Dios que allí repreſentauan. Pues cõ
cluvendo digo que eſte conoſcimiento, o
meditacion que el anima deſpues de pur-
gada halla en las criaturas diuinales, por la
qual es leuantada a la vnion del amor diui-
nal, es aqui llamada via illuminatiua, porq̃
por ella es alumbrado el entendimiento a
conoſcer a Dios en ſus criaturas, y la volun
tad leuantada a amar al Dios que aſsí co-
noce, y el como ſe haga eſto en el figuiente
capitulo ſe declara.
él C A P I T v I. O S E C Y N D. O.
De la manera en q̃el anima ſe deue exer
citar en la via que es dicha illuminatiua,
por el conocimiento de las criaturas.
I, Abiendo por la regia del Apóſtol S. Pà
V blo, que las coſas altas & inuiſibles de
Dios pueden venir en nueſtro conocimien
to, por la contemplaciõ de las criaturas en
quien la luz diuinal reſplãdece, por el qual
C . i. . otio-
