M I S TT C A, por amparo de los que por entonces no ſe pueden de ender, por las quales con toda a ticion de ues orar extendiendo tu chari- dad a todos aq̃i los que por la ſangre de tu red. pror fueron redernidos, y no ſolo eſtre cltando te a folos los parientes y amigos. El quinto anifo es que buſquemos para los exercicios el lugar mas ſecreto que pu dieres, ni des lugar a la amoneflacion de la thanas, que fo color de buen exemplo ó de otra qualquieroccafio te amoneſta poner- te en publico, que aunque a los Principios diſsimule contigo y te parezca (l aproue- chas a otros, quando no te catares te incre ra cuel lazo de la vana gloria, y te hara per- der tus trabajos, y dado que eſte auiſo ſea a todos neſceflario mucho mas en ! Pero es a los nueuos, cuyo amor es aun flaco como pimpollo nueuo, y de ligero podria ſer que brado porque los que ya por muchos ticin pos y exercicios eflan arravgatios circl a- mor diuinal a menos peligro le trueſtrãde fuera aunque no del todo fin alguno. El ſexto auiſo y muy denotares, él q""!" el O |