peccado, en no se le dar c̃ierto ella cualicil,
ó á -ía es de tan flaco fundamento y cio, sea
to que no tiene ninguno. I"nocencio; á en el
cap. Desis qui Eccleſiiam tuam ya referido di
ze, que a los I.-itionienfes manda les dẽél Sa
cra?ijerito en los dias a coltumbrados, y en el
articulo de la muerte y no dize que le pidan
los ejífermos lino que ſe le dẽlos ſacerdotes.
Y en el Conc. Trátl. tan poco dize, que lo pi-
dan lino q̃lo den. Y no lo piden eltos pobré!
los lios. Por que ven que no le lo d"", ni le,"F"
litij!"bra à clar a todos los de ſu naciõ, y li F"
mens̃len à dar lo a algunos, ver"Amos com"
acuden los demas á como por clara experien-
cia vemos, que por a tierles mandado que ſe cõ
fiellerá en sus enfermedades, tienen tanta vigi
laticta e?" "Ito, que a penas tienen vna calentá
ta, quando procuran de venirſe a con Iéllar-
Y con gran trabajo y peſadF?" "bre los lleuAá
dos y quatro y T"as leguas para q̃ le cõfiellé á
"F?" que aya muy poco que en ſu ſalud ſe con-
fellaron. Tambien no lo piden por que como
ignorantes de ſu remedio ſe van fin el. SeriA
buena eſcuſa de vu Chriſtiano, que teniend"
"búti lancia de "!"!" lites de salie perecer a It!
I?" "?" "?" "I" I?" "? bre por que no le pide dé F"
IIIII I",
