T" E. O I. O C O. pierden la que primero ganaron, quedan doſe ante Dios, y los hombres tenidos en poco, pues vieron los hombres que caye- ron de ſu eſtima, y vee mejor Dios que por ſí, ſoberuia mercicen ſer abatidos ante los ojos de ſu diuina Mageflad . Pues no los q̃ los hombres alaban y eſtima de uen ſerciti- mados, mas el que Dios eſtima, porq̃ſegun el Pfalmiſta dizc. Los q̃a los hombres apla zco, no alabados mas cõfundidos fon, por q̃ Dios los deſprecia. Aquella es liotra ver dadera que a cerca de Dios efla puefla, q̃ en ſolo el ſeruicio de Chriſto conſiſte! pues es muy cierto lícy de la gloria. Y aſsi es que todos aquellos que con amoroſos defieos en efla vida te miniſtra;en ſeran en el Cielo de tu padre celeſtial hõrados. Pues por tu palabra nos certifica (le, él los fiertios que a las bodas del celeſtial Padre de con pañas fueren hallados velado por el miſmo ſeñor ſentados a firmefa , ieran feruidos . 5.)be pues quien quiera q̃e res cõfitibundos defl̃ Ros a la fuente de la vida, y ten verguenca á III C |